«Hotel Flamingo en el Teatro Lara» – Volviendo a los orígenes, donde todo comenzó. | AIAEM Radio
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«Hotel Flamingo en el Teatro Lara» – Volviendo a los orígenes, donde todo comenzó.

¡Llegó el gran momento de construir «un hotel musical» en el centro de la ciudad!. Pero, ¡NO! en un sitio cualquiera.

Después de tantos éxitos cosechados, tocaba regresar al hogar, al origen, donde TODO comenzó. En este caso, «la casa» fue el Teatro Lara. Y, ¿quién/es iba/n a volver allí? Nuestros amigos de Hotel Flamingo, el grupo integrado por Andrea Guash y Rubén Tajuelo («Rosco»).

Pero, esta historia, ¿de qué trata?. Pues…, os la cuento.

Hace ya unas lunas, Andrea Guash y Rubén Tajuelo («Rosco») se conocieron trabajando en el musical «La llamada» de Javier Ambrossi y Javier Calvo que, en aquel momento, se representaba en el Teatro Lara. Después de ello, llegaron proyectos de futuro musicales como un grupo tributo a The Eagles y, sobre todo, Hotel Flamingo. Y, «cuando todo parecía inventado», llegaron la luz y la magia a sus vidas, se enamorándose y se casándose.  Ahora…, desde verano, son matrimonio.

Pues, después de tantos bolos, llegó la hora de «regresar a casa por Navidad», como el turrón de El Almendro.

Y, el sábado 10 de Diciembre de 2022, volvieron a la casa que les vió nacer en un directo con banda y con invitados de lujo. Además, en él, vinieron a presentar su nuevo álbum titulado «Discos y Vinilos».

La banda está conformada por Víctor Elías a los teclados, Álex Sierra a la guitarra, y, a la batería,  otro chico que no me acuerdo ahora de su nombre + ellos dos a las guitarras, pandereta y voces.

Puede que lo que vaya a decir, ya lo haya dicho antes. PERO…, si no lo he dicho, lo comento ahora: es el directo de Hotel Flamingo más emotivo y emocionante que he visto hasta la fecha.

Puede que como artículo quede bien. Pero, a partir de aquí, me voy a pasar a otro tipo de escritura. Una carta de un amigo a otro es lo que me sale escribir. Así que…, ¡ALLÁ VA!

 

Queridos Andrea y Rubén («Rosco»): 

En primer lugar, ¡ENHORABUENA POR EL CONCIERTO, AMIGOS!. A todo esto, le añado lo que, en otras crónicas, he escrito. No tengo palabras para deciros que vuestras canciones YA forman parte de mi vida.

Aunque, cierto es que este hecho lo conocéis, no quiero ahora, hablar de eso. En este momento quiero charlar sobre el origen y la vuelta al punto de partida.

Siempre es importante reconocer de dónde vienes, tu origen, tus raices, sea en el momento que sea (positivo, malo o regular). Y, hoy, os habéis reencontrado con todo lo que fuisteis hace ya unos años y habéis dejado marcado un nuevo punto de partida en vuestra trayectoria mientras cerrábais otra etapa en el Teatro Lara y es muy entrañable ya que le habéis demostrado al sítio que os vio nacer que NO dependéis de nadie más que vosotros mismos para llevar a cabo a un proyecto como lo es Hotel Flamingo.

Hoy os habéis alzado la copa de vencedores con el máximo triunfo dentro de vuestros conciertos. Hoy, habéis hecho historia de una etapa que, a partir de ya, seguro, tomará otro rumbo en años venideros hasta que decidáis volver al Lara a cerrar y abrir otra etapa.

Pero, hoy, soy yo el que tiene que daros las gracias por muchas cosas porque, gracias a hoy, me habéis conseguido ayudar a reencontrar con ese origen que yo tuve, ese pasado que marcó quién soy ahora, en mi vida personal.

Vuestras canciones me han hecho viajar a un momento de mi vida en el que empecé a caminar y aprendí a ser feliz, un momento que llegó después de 22 largos años de pasarlo mal en mi vida personal y moral (justamente en el 2019). Yo creo que esa anécdota tampoco se olvida porque la búsqueda del ser feliz que hice fue por mí, sin contar con nadie, solo conmigo mismo, reconociendo que debía poner punto y final a una gran parte mala de mi vida para enfocar mi camino hacia otra parte.

Mi sueño es devolverle a ese momento, en el lugar donde ocurrió todo, un concierto como el que hoy nos habéis regalado en vuestra casa, el Teatro Lara, para hacer que mi felicidad haga un punto y aparte  que sirva para reenfocarla y dirigirla hacia otras metas y ambiciones llenas de corazón y cariño, constancia, trabajo y fe.

Gracias por conseguir que, con vuestras canciones, SIGA CONSERVANDO LA ESPERANZA RENOVADA QUE ME QUEDA EN MIS ENTRAÑAS.

No sé para los demás. Pero…, para mí, con vuestro concierto, me habéis llevado a esto.

Y, por ello, estoy muy agradecido. Es uno de los regalos más bonitos que me habéis hecho. ¡NO LO VOY A OLVIDAR EN LA VIDA!.

Un abrazo, Hotel Flamingo y gracias por formar, con vuestras canciones, esmero, cariño, sensibilidad y comprensión, una parte importante de mi vida (tanto musical y profesional como personal).

Os estoy eternamente agradecido, chicos. ¡Gracias, gracias, gracias!

Vuestro amigo:

Víctor Moratalla.

 

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